Carnavales Pariteños

Carnaval: los cuatro días previos al inicio de la cuaresma cristiana, han sido dedicados a la diversión del cuerpo o la carne de allí el término de ‘carnaval». Al inicio del siglo, para la celebración de esta actividad, existían tres tunas: calle arriba, calle abajo y la de «blanco o ñopos». El acompañamiento musical entonces era a base de caja y tambor, con las denominadas «cantalantes». A partir de los años se­senta se organizan los carnavales presididos por reinas acompaña­das de las denominadas murgas. En la actualidad, el carnaval pariteño es toda una «institución»; ambas tunas cuentan con comités encargados de recaudar los fon­dos para sufragar los gastos que los mismos involucran. El ajuar de la reina y de su corte es costeado por cuenta propia. Las aspirantes a ser reinas manifiestan su deseo; y aceptado el ofrecimiento por el comité, se efectúa la proclamación y se da inicio a la realización de diversas actividades económicas para recaudar los fondos.